El diagnóstico actual de la alopecia se basa en técnicas por imagen. Estas técnicas permiten observar el pelo a nivel histológico (su estructura, es decir, por fuera), y permiten determinar aproximaciones a la alopecia más común, la alopecia androgenética (MBP), además de ofrecer otras indicaciones, como si es una alopecia cicatrizante o no. No obstante, no ofrecen información concreta sobre la mayoría de los otros tipos de alopecia, y aún postulando que la persona sufre alopecia androgenética, no se pueden saber las causas moleculares ni celulares, ni se puede saber con exactitud cual es el mejor tratamiento para esa persona, de hecho, ni siquiera es posible saber si la alopecia androgenética es la causa principal de la caída capilar o si se debe a un desbalance de otros procesos moleculares que dan como resultado la alopecia androgenética.
Esto provoca que saber cuál será el mejor tratamiento para esa persona es imposible, de manera que el dermatólogo capilar suele tratar a esa persona con diferentes tratamientos, buscando cual es el más eficaz, lo que a veces funciona y otras no, además de que en algunos casos ocasiona otros problemas secundarios y una gran pérdida de tiempo y dinero para la persona.
No obstante, en los últimos años ha aparecido una tendencia revolucionaria en el campo de la regulación genética, la epigenética, la cuál puede convertirse en la gran esperanza de las personas con todo tipo de alopecias. Explicado de forma simple, la epigenética, cuya palabra significa “por encima de la genética”, es la que determina cómo va a actuar un gen, es decir, si se expresará más, menos o nada, que en última instancia es lo que provocará una buena o mala respuesta del organismo (40). Esto significa, que tener un “gen bueno” o un “gen malo” no es determinante, ya que un “gen malo” puede ser mejor que un “gen bueno” si se le aplican los estímulos apropiados.
En definitiva, la epigenética pone nuestro destino en nuestras manos, no en el de los genes. Por ejemplo, la epigenética es capaz de explicar porqué incluso con exactamente los mismos genes, un gemelo idéntico puede desarrollar una enfermedad específica y su gemelo idéntico no, o porque teniendo el mismo gen que induce cáncer, por poner otro ejemplo, un individuo desarrollará cáncer y otro no. La epigenética es la última frontera de la regulación genética (41).
Una de las múltiples ventajas de la epigenética sobre la genética es que es un proceso muy dinámico, en el que se puede influir, lo que significa que, a diferencia de la genética, donde no podemos hacer nada, la epigenética nos da el poder de gobernar nuestros genes, lo que pone en nuestras manos el poder de cambiar lo que no está funcionando correctamente, como por ejemplo, nos permite entender qué pasa con la pérdida capilar a nivel celular y molecular, y por ende, nos posibilita cambiar el curso de esta afección.
Además, la epigenética nos permite entender lo que sucede en cada persona a nivel individual, lo que nos permite realizar un diagnóstico de la alopecia específico y personal, entendiendo las causas de la pérdida capilar sean del origen que sean, entender qué tipo de alopecia está sufriendo cada persona, sea cual sea, y de esta manera, ayudarle a escoger su tratamiento ideal.
Referencias
40. Zoghbi, H. Y. & Beaudet, A. L. Epigenetics and human disease. Cold Spring Harb. Perspect. Biol. 8, 1–28 (2016).
41. Dove, A. Epigenetics: The Final Frontier? Science (80-. ).326, 303–303 (2009).